Si ya resulta complicado conocer gente, pareja, oportunidades de sexo fugaz, imagínense los que tengan gustos peculiares para el común.
Por ejemplo, ahora en invierno, por qué no aprovechan Benidorm o La Manga para ofrecer encuentros entre sádicos y masoquistas.
Realmente les tiene que ser complicado conocerse: qué hacen. ¿Un simple vistazo en la disco y se descubren? ¿Una cita en un parque y una flor en el ojal y Justine en el bolsillo? ¿Quedar en el cine a ver Belle de Jour, El Imperio de los Sentidos o la reciente Secretary?
Lo divertido de ese encuentro entre sados y masocas sería saber quiénes acudirían mayoritariamente, es decir, qué hay: más sádicos o masocas en el mundo.
Al principio, me inclinaba por los sádicos, pero entre los españoles el masoquismo está muy entendido.
Después del single masoquistas y sádicos se abren infinitas posibilidades. Pueden aportar sus ideas.
1 comentarios:
De tus mejores entradas Jaime. Muy buena, en serio.
Apuesto por los Sádicos.
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