Las comedias dramáticas obreras británicas casi siempre me arrancan la risa y al poco me hacen soltar la lágrima. Y la tristeza no se me va mientras las veo. Obreros, clase trabajadora, contra Thatcher y sus epígonos es cantarle a una derrota, aunque, como dijese el poeta, humanamente tal vez ganasen
Obreros y gays contra Thatcher, se resume pronto Pride (basada en una historia real); obreros y gays, más los primeros, contra sus propios prejuicios. también se resume pronto el otro tema.
Pride (Matthew Warchus, 2014) tiene lo mejor de la comedia británica apegada a la realidad y que no me resulta costumbrista. O quizá sea costumbrista pero costumbrismo británico y no español, que no lo soporto. Comedia obrera en españa se hizo con buenos resultados en Pídele cuentas al Rey. Sigue la estela de Tocando el viento, por ejemplo, más que de Full Monty, más del Kean Loach de La camioneta y Café Irlandés. Y como ellas cuenta con actorazos: Dominic West (Mc Nulty en The Wire), Imelda Staunton, Paddy Considine, Andrew Scott (Moriarty en el Sherlock de BBC), Bill Nighy (Love Actually y tantas -inciso: la comedia británica, incluso la de estrellas, tiene algo que la comedia Hollywood no tiene)... Además de un punto de partida irresistible: gays y lesbianas londinenses deciden solidarizarse en 1984 con los mineros galeses en huelga (Lesbians and Gays Support the Miners), los cuales no saben qué hacer: ¿aceptan o no la ayuda? Aquí se produce el choque cultural y los prejuicios de unos y otros. Es cierto que pasa por encima de los conflictos y los personajes están tratados muy superficialmente: el activista, el joven que vive su experiencia iniciática, el gay que se esconde, la homófoba... Este cine británico, con sus excelentes actores secundarios, obliga al guionista a definirlos de un trazo, y a veces se escapa un brochazo.
Quizá no sea sutil: obreros y gays en tiempos de dos virus asesinos: Margaret Thatcher y el SIDA en sus comienzos.
Cuenta además con una banda sonora increíble, una mezcla explosiva: Pete Seeger, Billy Bragg, Joy Division, Soft
Cell, XTC, Bananarama, Tom Tom Club, Lloyd Cole (el disco debut con su banda fue de ese mismo 1984), Japan... Aquí el listado al completo.
Y, en un momento de la película, la desconocida en España pero famosa en Gran Bretaña por participar en el concurso televisvo La Voz, Bronwen Lewis, canta Bread and Roses, una de las letras más bellas que he leído y que dio título a una película de Ken Loach: Bread and Roses.
Historia real (en parte spoiler)
Pride deja el resquicio para la esperanza. Las minas se cerraron,
aquella lucha se perdió, pero anticipa la convergencia o confluencia
entre movimientos sociales que ahora se están produciendo.
En 1985 mineros galeses encabezaron el Día del Orgullo Gay en Londres); anteriormente el Partido Laborita había debatido el incluir a igualdad de derechos en sus estatutos, aunque la moción no salió adelante; en Bournemouth, el mismo año de la Marcha y de la derrota de los mineros, los laboristas por fin aprobaron la igualdad de derechos con el apoyo masivo del sindicato nacional de mineros. Estos también encabezaron la protesta dentro de los laboristas contra el infame artículo 28: las autoridades no deben «promocionar la enseñanza de la aceptabilidad de la homosexualidad como una supuesta relación familiar en cualquier escuela subvencionada.»
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