Cantaba Astrud en Minusvalía: "Me dio más pena el último episodio de Friends que lo nuestro". A mí me ha pasado algo parecido con el final de Lost y de 24. A Jack Bauer lo echaré de menos. La Isla es la Isla. Pero la droga en vena fueron las trepidantes temporadas de Jack Bauer.
Aunque ya estaba en Alias, es en 24 donde se llega hasta el fondo en esos finales que parecen de folletín: la acción la dejan inconclusa hasta el siguiente capítulo. Lo del tiempo más o menos real no es nuevo. Ya ocurría en Encima de la hora, una película aceptable de Johnny Deep.
Jack Bauer es por encima de todo un héroe de los de antaño, de los que todavía aparecen en las novelas de Reverte. Cumple su trabajo como un profesional (hasta la última temporada) sabiendo que el mundo es una mierda.
Nos ha dejado temporadas increíbles como la primera, la quinta (con Charles Logan) y la octava. Todas las demás, menos la sexta, merecían la pena.
Nos ha dejado personajes increíbles como David Palmer (un Obama antes que Obama), el ya citado Charles Logan, la mejor de todas, Chloe O'Brian, Nina Myers, Tony Almeida, Kim Bauer, Dana Walsh (quizá la más esperada, tras convertir su personaje en Battlestar en nuestra heroína del siglo XXI: Kate Sackhoff, por supuesto, o Captain Kara 'Starbuck' Thrace) o Kayla Hassan (quédense con su nombre real, Necar Zadegan, porque es una actiz fabulosa, lo mejor de la última temporada).
Nos ha dejado reflexiones sobre la tortura, sobre Jack Bauer y la tranquilidad imposible, sobre Jack Bauer y las mujeres: esa relación última con Renee, condenada al fracaso antes de comenzar...
En fin, que esperamos que la pantalla grande recupere a Jack Bauer, aunque no sea algo tan patético como el Redemption que hicieron. Yo ya lo tengo en los altares: dolerá citarlo al lado de The Wire o The West Wing, pero a su manera está a su altura.
Una recopilación de chistes sobre Jack Bauer.
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