
Camino por México y Anthony Blunt ya es uno de los Apóstoles de Bloomsbury. Poco después yo me encuentro en una cantina del Oeste y Blunt, por su parte, se ha convertido en espía soviético. Unas horas más y estoy hasta las narices de China y Polinesia y al «pobre» Blunt lo ha desenmascarado Margaret Thatcher.