Trailerbook de Morbo Gótico.
Entrevista a Ana Ballabriga:
—¿Cómo funciona el proceso de escribir a dos manos?
—Lo más importante es hablar mucho. Pasamos tiempo discutiendo sobre la trama y los personajes. Una vez que tenemos clara la historia, pasamos a estructurarla y después nos distribuimos el trabajo entre los dos. Cada uno coge una serie de personajes o de tramas y las escribe. Después nos revisamos mutuamente lo escrito.
—Nuestra novela tiene muchas características del género negro: se investiga una serie de asesinatos, predomina la oscuridad y la lluvia (aunque los protagonistas no llevan gabardina) y hay mujer fatal. Aunque también se pueden encontrar otras referencias. Hoy en día es habitual combinar géneros.
—Generalmente el género negro y el psicoanálisis, sobre todo en el cine, han ido de la mano en Recuerda de Hitchcock, Vorágine de Preminger o Secreto tras la puerta de Fritz Lang, por ejemplo. ¿Cree usted que se ha conseguido en alguna película o novela destacar de una manera creíble el papel que puede jugar la psicología en la resolución de crímenes?
—La corriente psicológica que más se ha incorporado al cine y a la literatura, de una manera romántica y naif, ha sido el psicoanálisis. Es muy atractiva porque habla de traumas en la infancia, por el poder de los sueños y por lo fácil que es la curación después de haber descubierto el origen del trastorno (así ocurre en Marnie, la ladrona, de Hitchcock, por ejemplo).
En la realidad hay personas encargadas de establecer perfiles psicológicos para resolver crímenes. En España podemos hablar de Vicente Garrido y de cómo ayudó a resolver el caso de un asesino en serie de Castellón. De este caso se hizo una película para la televisión. Y una película magnífica fue la de Zodiac.
—La protagonista de la novela, Nicolasa, es sicóloga. ¿Tiene algo de usted?
—Supongo que sí, siempre escribimos de lo que conocemos o creemos conocer. Nicolasa se mudó de ciudad para empezar una nueva vida, a mí también me paso algo así. Vine a Murcia sin conocer a nadie y tuve que ir abriéndome camino. Por lo demás, mi vida ha sido bastante más apacible, por suerte.
—Vuestra anterior novela, Tras el sol de Cartagena, se desarrollaba en una ciudad que por lo menos David debe conocer muy bien. Sin embargo, esta nueva novela transcurre en Lisboa. ¿Qué proceso de documentación ha seguido?
—Tras el Sol de Cartagena fue una novela dura porque transcurría en nuestra ciudad, y los personajes los sentíamos muy cercanos. Era salir a la calle y continuar dentro de la novela. Morbo Gótico necesitaba de una ciudad mayor y esto nos permitió cambiar totalmente de escenario.
Tenemos una amiga en Lisboa y su hermano nos hizo de guía en el verano de 2007. Hicimos otro viaje más. Recorrimos Lisboa, que es una ciudad preciosa, hablamos con la gente, visitamos la sede de la Policia Judiciaria,… y tomamos mucho licor de guinda.
—Si se llevara al cine, ¿qué director le gustaría que la dirigiera y qué actores interpretar a Nicolasa y Nuno?
—Los lectores nos comentan que es una novela muy cinematográfica y yo, sin embargo, no estoy tan convencida porque hay mucho diálogo y el monólogo interior de la protagonista es muy importante.
—Además de escribir novelas, tienen su propia productora y están terminando el guión para una película. ¿Continúan en el terreno de la intriga o cambian de género?
—Nos encanta la intriga y en nuestras historias casi siempre está presente.
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