viernes, 29 de abril de 2011

De Cospedal-Ana Pastor: más importante que TVE ignore a IU


Mi madre todavía hace unos años decía: "Voy a ver el parte" (el último radiofónico de nuestra Guerra Civil el famoso: "En el día de hoy, cautivo y desarmado..."; después continuó llamándose igual). Y encendía TVE.



Hace un par de días la periodista Ana Pastor y la candidata popular De Cospedal discutieron sobre la parcialidad de la televisión pública. La popular: "A veces, las informaciones de TVE dejan mucho que desear en el ámbito de lo político. No está siendo desde el punto de vista informativo una televisión pública imparcial como debería ser". La periodista: "es un orgullo para los trabajadores de TVE trabajar en esta etapa de libertad. Las encuestas y todos los premios que han recibido los informativos de la cadena no dicen que sea como otras épocas anteriores con el PP o del PSOE".
Me incomodan los periodistas rebajándose al nivel de los políticos (me incomodan más todavía los periodistas que se dedican a la política, como ocurrió con María José Alarcón y la Alcaldía de Murcia).
Tiene razón el Partido Popular al quejarse de que asuntos como el Faisán y, sobre todo, las ERES andaluces no han recibido un tratamiento extenso en la televisión pública: el primero afecta a su más que probable candidato; el segundo a la Comunidad Autónoma de Andalucía: donde el PSOE se juega todas sus opciones de no obtener un resultado ridículo (no en las autonómicas que estarán igualdas, sino en las generales).
Comparto con Ana Pastor que TVE ha mejorado (nunca va a ser la BBC, no ya en informativos, sino en series críticas con el Poder o en documentales exportables): un debate que tienen por la noche está bien y, hay que recordar que en el que dirige Ana Pastor, De Cospedal habló de no imparcialidad de TVE en la propia TVE. "Mi patrimonio es la dignidad profesional y el periodismo" se defiende Ana Pastor, y los periodistas poco más tienen.
Como ocurre en estos casos, medio establishment defiende a la periodista y medio a la política. Pero, además de recordar el Faisán o la condena a TVE en tiempos de Aznar-Urdaci, se entra poco en otros debates más interesantes: el primero, el que le afearon votantes de Izquierda Unida a Mamen Mendizábal (y que podrían afearnos a casi todos los periodistas): el escaso interés que se presta a partidos políticos que no sean los del Régimen: PP y PSOE. El segundo, la necesidad de TVE. La televisión pública no es una línea de autobuses que conduce hasta un pueblecito donde solo hay tres habitantes para bajar a la ciudad: ninguno tiene coche y dos de ellos necesitan ir todos los días al médico. En España hay medios de comunicación de sobra (por desgracia también hay periodistas de sobra) para que debamos continuar gastando nuestros impuestos en pagar esta televisión o la autonómica murciana o cualquiera otra (podrían, por ejemplo, financiar la televisión pública con los impuestos de quien esté dispuesto a verla). Pero este debate no interesa a PP y PSOE; para qué si uno de los dos la va a controlar: luego dependerá del "talante" (eso que se prefiere a la inteligencia) de cada uno. En mi opinión, acierta Ana Pastor cuando defiende esta etapa como la menos censora de TVE. Lo que no quita que IU, UPyD apenas salgan. Y eso es más importante que De Cospedal, Ana Pastor, Ana Mato, Oliart... porque los ciudadanos se quedan sin opciones.


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1 comentarios:

Anónimo dijo...

Te olvidas de González Barnés o de Ruiz Vivó. Salvo que no les consideres periodistas, claro, como yo.