lunes, 27 de octubre de 2014

Trotski. Una biografía, de Robert Service

Robert Service
Al lector de Trotski. Una biografía de Robert Service quizá le falte un epílogo que ahonde en el porqué del extraordinario influjo que aún mantiene el revolucionario ucraniano (mejor que influjo, la admiración) y cómo la versión que él ha dejado escrita de la Revolución Rusa y del estalinismo es la que ha trascendido. Lo responde en parte en el último capítulo, "Los guardianes y la llama", donde el historiador sostiene que "los trotskistas inventaron a un hombre y un líder que se parecía sólo erráticamente a Lev Davídovich Trotski".

 Si la versión que ha quedado de la Revolución Rusa es la de Trotski tiene que ver con el hecho de que ningún bolchevique estuvo tan dotado como él para la literatura (oral o escrita); si aún se le profesa admiración se debe, en gran parte, a la biografía que escribió Isaac Deutscher, pero, sobre todo, a que "al ser asesinado se convirtió en un mártir político y, a partir de ahí, muchos autores que de otro modo lo hubieran tratado con escepticismo le otorgaron el beneficio de la duda".
Quizá le falte ese epílogo o quizá encuentre más que suficientes pistas a lo largo del libro de Robert Service. Pero sin duda el lector español lamentará no conocer más de la relación entre Trotski y el POUM y sobre su opinión acerca de la II República y la Guerra Civil (además de algún que otro detalle de Ramón Mercader, su asesino).
Como no he leído la de Deutscher, no sé si calicar ésta como contra-biografía (aunque opina: "Deuscher le había hecho un altar a Trotski"), en cambio, estoy seguro de que sorprenderán a más de un lector las conclusiones de Robert Service: entre Trotski y Stalin no hubo tantas diferencias ni diferente hubiera sido el trotksismo en el poder del estalinismo que venció. De hecho, cuando Trotski estuvo en el poder perpetró políticas similares a las de Stalin y, aunque criticara el estalinismo, en sus cartas en el exilio no se aprecia un rechazo total: la Revolución de Octubre se había torcido, pero Trotski nunca dudó que hubiera sido un acierto o que el germen de políticas posteriores se encontrara en esos primeros tiempos, de la Revolución a la Guerra Civil donde tan solo Lenin brilló más que él. Quizá hubiera una distancia entre Stalin y Trotski, más en política exterior y en democracia interna (dentro del bolchevismo), pero no en el uso del terror ni en las políticas colectivizadoras, por ejemplo ("Lo cierto es que Stalin, Trotski y Lenin coincidían en muchas cosas y discrepaban en pocas". Sí hubo diferencias muy importantes en cuanto a la personalidad,  y en parte por ellas se explica el éxito de Stalin y el fracaso de Trotksi ("por ejemplo, Stalin no era ningún mediocre, sino un hombre excepcionalmente dotado y con un gran talento para el liderazgo. La estrategia de Trotski para lograr el avance del comunismo tenía muy poco que ofrecer a la hora de prevenir la creación de un ´regimen opresor. Sus ideas y prácticas proporcionaron diversas piedras fundacionales para la erección del edificio estalinista en sus vertientes política, económica e incluso cultural").
Robert Service en esta biografía de más de 700 páginas publicada por Ediciones B sigue a Trotski desde su nacimiento hasta su muerte, aunque dedica más atención a ciertos temas que otros: Trotski, que era judío, y su ascendencia (los judíos y la revolución; la necesidad de una patria judía, idea que descartó casi al final de su vida); Trotski y Lenin; Trotski y Stalin; Trotski y los bolcheviches; Trotski y la Revolución Internacional; Trotski y las políticas soviéticas ("no era el padre dee la NEP, pero sí uno de sus tíos") Trotski y sus exilios; Trotski y las mujeres (y la familia); Trotski, orador y escritor; Trotski y los trotkistas; la salud de Trotski (enfermedad que extrañó a sus contemporáneos y que además le sobrevenía en los momentos en que "precisamente" no debía enfermar); Trotski y los trotkistas (los norteamericanos, a los que Service, consideraba los más dotas, en general abandonaron el trotkismo, aunque fueron quienes primero compararon nazismo y estalinismo y hablaron de burocratización -una nueva clase: la burocracia- en la URSS"), Trotski y la Cuarta Internacional...
Echo de menos en la biografía de Trotki que Robert Service una expliación con más detallada del contexto histórico en el que se mueve (al lector nos presupone unos conocimientos sobre un periodo de más de medio siglo de historia que tal vez no poseamos); asimismo Robert Service es un biógrafo que continuamente da su opinión sobre el biografiado, lo que en algún momento puede molestar a un lector que prefiera hacerse la suya propia conforme va leyendo el libro.
Para terminar, una frase de Robert Service en la que explica su fracaso final: "era un revolucionario perpetuo, pero no un político con dedicación absoluta". O mas ampliada: "La mayoría aceptó la apología de Trotski con lo que implicaba: que nunca había tenido realmente una oportunidad. No lo habían entendido. Sin embargo, las políticas de Trotski formaban parte del comunismo autoritario y en verdad tuvieron la oportunidad de triunfar. Incluso su origen judío era un obstáculo superable. Por desgracia para él, sus instintos tácticos no estaban muy desarrollados. Como aglutinador de adeptos era un desastre. Sin ninguna necesidad se distanciaba de mucha gente en todos los niveles del partido. Se podría decir que él mismo que era su peor enemigo".
La contra-biografía de Robert Service, no sé si es la mejor publicada hasta la fecha, como afirma John Gray en Literary Review, pero sí una que no deja a nadie indiferente: en 2009 ganó el premio Duff Cooper; al publicarse Paul Le Blanc la consideró "el segundo asesinato de Trotski".

Cristopher Hitchens y Robert Service debaten en televisión sobre la figura de Trotski (fue en un artículo de Hitchens donde leí por primera vez de la biografía de Service): http://youtu.be/NBbABRdeVCA








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