Hoy se celebra el Día de la Mujer y Hollywood se ha unido a la celebración premiando a Kathryn Bigelow, la primera mujer que gana los premios a mejor dirección y película por En tierra hostil. Bigelow además no hace un cine que, si continuamos basándonos en los estereotipos, llamaríamos femenino. Le llaman Bodhi o K-19 son productos de acción, pura adrenalina como En tierra hostil. Bigelow se enfrentaba a su ex marido, James Cameron, del que se esperaba que arrasara con su taquillazo Avatar. Pero esta película no es más que cine infantil, con éxito debido al ya famoso 3 D. Sin embargo, este mismo fin de semana Tim Burton ha estrenado su Alicia en el País de las Maravillas en 3 D y ha logrado más recaudación en sus primeros días que Avatar.
El éxito de la Bigelow es merecido, aunque para mí la mejor de las películas en liza era la de dibujos de Pixar Up. Únicamente sus diez primeros minutos, su prólogo, contiene más cine que todas las demás concursantes.
Por lo demás, el resto de los premios estaba cantado: Sandra Bullock ha ganado el de mejor actriz por The Blind Side, aunque yo hubiera preferido a Carey Mulligan por An Education. Sandra Bullock interpreta una madre de familia de clase alta que decide adoptar a un adolescente negro. Curiosamente Sandra Bullock ha conseguido este año el premio a la mejor actriz en los Oscar y también el Razzie (otro premio) a la peor actriz por Loca obsesión. Éste, sin duda, es su año. El mejor actor ha ido para el incomparable Jeff Bridges o, como preferimos los de mi generación, El Nota. Crazy Heart, su película, es de las que gusta al público americano: antigua estrella de country en decadencia encuentra su última oportunidad. Una lástima que el Oscar se lo den precisamente por una película que no pasará a la historia. Lo mismo que ocurre con el drama Precious, del que se ha premiado sabiamente a su actriz secundaria Monique, pero que por momentos parece un telefilme de los de Antena 3. La propia Penélope Cruz en una entrevista antes del Oscar se declaraba perdedora. En esa misma entrevista señalaba que en el futuro pensaba hacer menos papeles pero de calidad. Algo que se contradice con su participación en Piratas del Caribe 4 en vez de en la última de Lars Von Trier. Ella sabrá.
El secreto de sus ojos del argentino Campanella ha ganado el Oscar a la mejor película extranjera. No puedo con Campanella ni puedo con el cine argentino. Le di media hora y la quité. Me hubiera gustado que lo hiciera la cinta francesa El Profeta, carcelaria como Celda 211 y de la que se podrían hacer jugosas declaraciones.
Por último, y ya que nos encontramos en el Día Mundial de la Mujer, los jóvenes y las jóvenes debería ver en el cine An Education, la relación entre una chica de dieciséis años y un hombre de treinta en la Inglaterra de los años 60. Una época de comienzos de libertad, pero todavía opresiva, victoriana para las mujeres. Con esta maravillosa película vemos lo que hemos avanzado y lo que nos queda por avanzar.
El éxito de la Bigelow es merecido, aunque para mí la mejor de las películas en liza era la de dibujos de Pixar Up. Únicamente sus diez primeros minutos, su prólogo, contiene más cine que todas las demás concursantes.
Por lo demás, el resto de los premios estaba cantado: Sandra Bullock ha ganado el de mejor actriz por The Blind Side, aunque yo hubiera preferido a Carey Mulligan por An Education. Sandra Bullock interpreta una madre de familia de clase alta que decide adoptar a un adolescente negro. Curiosamente Sandra Bullock ha conseguido este año el premio a la mejor actriz en los Oscar y también el Razzie (otro premio) a la peor actriz por Loca obsesión. Éste, sin duda, es su año. El mejor actor ha ido para el incomparable Jeff Bridges o, como preferimos los de mi generación, El Nota. Crazy Heart, su película, es de las que gusta al público americano: antigua estrella de country en decadencia encuentra su última oportunidad. Una lástima que el Oscar se lo den precisamente por una película que no pasará a la historia. Lo mismo que ocurre con el drama Precious, del que se ha premiado sabiamente a su actriz secundaria Monique, pero que por momentos parece un telefilme de los de Antena 3. La propia Penélope Cruz en una entrevista antes del Oscar se declaraba perdedora. En esa misma entrevista señalaba que en el futuro pensaba hacer menos papeles pero de calidad. Algo que se contradice con su participación en Piratas del Caribe 4 en vez de en la última de Lars Von Trier. Ella sabrá.
El secreto de sus ojos del argentino Campanella ha ganado el Oscar a la mejor película extranjera. No puedo con Campanella ni puedo con el cine argentino. Le di media hora y la quité. Me hubiera gustado que lo hiciera la cinta francesa El Profeta, carcelaria como Celda 211 y de la que se podrían hacer jugosas declaraciones.
Por último, y ya que nos encontramos en el Día Mundial de la Mujer, los jóvenes y las jóvenes debería ver en el cine An Education, la relación entre una chica de dieciséis años y un hombre de treinta en la Inglaterra de los años 60. Una época de comienzos de libertad, pero todavía opresiva, victoriana para las mujeres. Con esta maravillosa película vemos lo que hemos avanzado y lo que nos queda por avanzar.
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